EL SÉPTIMO DÍA. APERITIVOS DE CULTO
El domingo no es un día cualquiera: es el séptimo día de la semana. Y hay que celebrarlo.
EL SÉPTIMO DÍA. APERITIVOS DE CULTO rinde homenaje a esta práctica cultural a la que dedicamos los domingos, transformándola en un rito terrenal y pagano y poniendo en valor su carácter festivo, de encuentro y celebración.
Cada aperitivo se inaugura, como en todo rito dominical digno de ese nombre, con un sermón de una personalidad del mundo de la cultura, tras el que se sucede un programa de actividades donde todo gira alrededor de una disciplina artística, mientras el público bebe vermut y disfruta de una variedad de tapas.